"No camines detrás de mí, puedo no guiarte.
No andes delante de mí, puedo no seguirte.
Simplemente camina a mi lado y sé mi amigo"
(A. Camus)


sábado, 18 de julio de 2009

Ya sé que esto es una vergüenza...

Lo reconozco: tener un blog para no escribir nada en tantos días es de juzgado de guardía...

Pero del 19 al 30 de julio estoy fuera, o sea que seguirá esta racha. Prometo perseverancia en agosto... ¡lo intentaré!

viernes, 3 de julio de 2009

Existencialismo ateo


Está de moda recorrer este camino apasionante de la vida "como si Dios no existiera". Forjamos en la fragua de lo cotidiano nuestro quehacer, nuestro vivir, y en ese arduo trabajo nos olvidamos de martillearnos -para modelarnos- con el instrumento divino. No es que sea yo un nuevo Rouco-Cañizares pero la idea de Dios me parece interesante. Por lo siguiente:


1.- Lejos quedan los tiempos de Jean-Paul Sartre. Este hombre tenía verdadero odio personal a Dios; y no sólo a Dios sino al género humano. Ataca no sólo a la fe, sino a la esperanza... "Si Dios existe, yo no soy libre. Pero consta que yo soy libre. Luego Dios no existe." Se pensaba que la Libertad era el nuevo estado antropológico ¿pero somos tan libres como pensamos? ¿O vivimos en una "libertad" tutelada, amparada, protegida?


2.- Hoy, en la época del pensamiento débil, nos quieren hacer creer que la libertad es vivir de acuerdo con tus ideales... profunda mentira ya que eso es simplemente credibilidad -los alemanes contrarios a Hitler vivían según sus ideales, lo que no podían era expresarlos políticamente-. La libertad sería el poder desarrollar en la sociedad en la que vivo esos ideales, en base a unos criterios comunes: mi ideal puede ser que la mujer vaya de burka de los pies a la cabeza, pero en una sociedad occidental europea sería extraño, hecho que en cambio es aplaudido en otras latitudes no tan lejanas.


3.- Libertad pues como capacidad radical de ser protagonistas de nuestra vida. Que me dejen ser libre, es decir, que no pongan coartadas: ¿Dios es la gran coartada a nuestra libertad? Yo creo que no. Si vivimos en el amor, respeto, tolerancia, solidaridad, entrega, servicialidad, perdón que son notas características de la "divinidad" no serán sino acicates. Otra cosa es la imagen que los representantes oficiales de la "divinidad" enseñen. Prefiero esas coartadas divinas a las "humanas": peloteo, chupatintas, estafas, engaños, infidelidad... Nos dicen que somos libres de Dios precisamente los que más atados están a las engañosas cadenas: los políticos, al dinero, al puesto y a los privilegios; los filósofos mediáticos, al marketing, a su buen sueldo universitario y/o de comité de sabios, a las conferencias de media hora por unos buenos cuartos... O sea que me quedo con Dios... ¿me equivocaré? Al final del camino os contaré...
Y vosotros ¿qué pensais?...