"No camines detrás de mí, puedo no guiarte.
No andes delante de mí, puedo no seguirte.
Simplemente camina a mi lado y sé mi amigo"
(A. Camus)


lunes, 3 de febrero de 2014

Saber que tienes de quien tirar...

                      

No es fácil vivir. Si quieres ser un pasota, comunero o un Robinson Crusoe podrías intentarlo. Pero la poca emoción de las cosas haría que saltases desde el primer puente.
 
La vida no se hizo para afrontarla en solitario. Demasiadas puertas que se cierran, desesperanzas que oprimen corazones, sueños que trastocan en pesadillas, metas que sólo se alcanzan por relevos. Podemos y queremos ser felices, pero a veces esa felicidad debe contentarse con el simple deseo de que no vengan ya más problemas. Es una felicidad "de tregua" (aparente, pronto la calma amanecerá).
 
Es verdad que sólo tiene problemas el que los busca. Cuando quieres un final a cada historia o luchas por tus sueños, es posible tengas que esforzarte, sacrificarte, pasar noches en blanco. Hacemos demasiados cálculos, pero son necesarios para no caer en la simpleza de creer que las cosas vienen solas. No: ¡hay que salir a por ellas! Y dejar la comodidad de casa y de mi vida, cuesta. Pero lo cobarde sería tirar la toalla a la primera decepción o al inicio de los síntomas de cansancio.
 
Luchar, esforzarse, no desesperar, seguir buscando. Si fuera fácil, no merecería la pena. Sólo lo que cuesta lograr es lo que premia mi vida, que no es de esfuerzos baratos sino de sueños casi imposibles.
 
Y en medio de la lucha, del esfuerzo, del cansancio, de las noches en blanco. Y en medio de los proyectos, y las esperanzas, y las alegrías... Los demás. Mi gente, mis amigos, los que he decidido son parte de mi vida, son imprescindibles en ella. Los necesito, me necesitan. Me conocen bien, los conozco de sobra. Y entre ellos siempre destaca una persona: la que no sólo es necesaria a veces, sino siempre. La que no cambiarías por nada, por nadie. La que con sólo decir "ven" sabe dónde tiene que estar. ¡Merece la pena la vida compartida! ¡Merece la pena cuando puedes decir: 'VEN' y te sobran las llamadas!
 
¡Aprovecha la vida, lucha y disfruta! ¡Y hazla disfrutar!